Puedo decir que Mágico es el feliz resultado de la constancia y el foco en los temas que siempre me interesaron. La relación con las personas y el vino. Mis años en Buenos Aires fueron importantes en la capacitación dentro de la industria vitivinícola, pero fue al llegar a Bariloche cuando mis anteriores inquietudes se juntaron con mis ganas de crear algo diferente.
Así nació Mágico Wines. Llevo años visitando y conociendo pequeños, medianos y grandes productores de todo el país; eso me permitió obtener una formación real, directo de las fuentes. Dentro mío fue naciendo un gran respeto por el producto, por la tierra y los productores. Ellos no solo me transmitieron importantes conocimientos en temas como la cosecha, el fraccionamiento, el remontaje, el suelo, el clima y el circuito de venta; sino que también me permitieron generar un negocio a la medida justa y con características únicas.
Actualmente siento alegría y orgullo al ver que Mágico sigue creciendo con el mismo objetivo con el que nació, acercar personas al mundo del vino para que puedan disfrutar de él y apreciar nuestro trabajo. Mis agradecimientos a todos los responsables por el nacimiento de cada nuevo vino en este país.
Diego Consolazione.
